‘Y la Muerte Llegó’
La calle estaba vacía, un domingo por la mañana, al día de su virgencita. En un giro, se fue el coche, y justo en ese momento, una furgoneta de una Iglesia se la llevó por delante. No había más coches, sólo, ella, y el destino. Un infarto se la llevó, a la edad de la jubilación, se jubiló de la vida.
Pero la historia no termina ahí…
Tras su muerte, y la de su amiga, misteriosos casos siguieron en la misma calle. Tras pocos años, cuatro, los hombres de esa calle fueron cayendo como fichas de dominó, y de las mismas enfermedades. Al menos cuatro se fueron entre sus casas, y dos cercanos, familiares, que habían vivido ahí, también. El último, su marido.
La Maldición de los hombres que no querían a sus mujeres, la pagaron varios hombres, ¿casualidad?, quizás, ¿destino?, está claro.
Ahora se aparece en forma de mariposa, monarca, no menos, para avisar de que está ahí.
Relato de Mari Carmen Rivero, 30 de septiembre de 2015.